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No permitan que se privatice el agua

Columnista huésped | 18 de Julio 2008

Por Juan Jaramillo Antillón, ex ministro de Salud Pública

El Minae está impulsando en el Congreso un cambio a la “Ley del recurso hídrico” ya dictaminada, y que trata sobre el agua, el recurso más importante para la vida y la salud del ser humano. Hasta el momento actual y como está redactada la ley, esta establece claramente el empleo del agua en calidad y cantidad suficiente, como “derecho humano”, lo cual permite una interpretación adecuada de la ley a la luz de ese principio general.

El Minae increíblemente señala que “el agua es un recurso de usos múltiples” eliminando así la prioridad del uso humano y poniendo incluso la palabra comercial dentro de la definición. De un solo golpe se elimina la concepción que ha privado al presente en el país en el campo social, legal y de la salud, de que este líquido, es un bien común y un derecho de todos los costarricenses.

El Ministro del Minae pretende que se le cambie de nombre a su ministerio llamándole “Ministerio del ambiente, El Agua y la energía, y que a él, se le dé el poder de fijar las políticas y las decisiones sobre la explotación y el empleo del agua potable del país. Además, elimina el papel tan importante que ha venido cumpliendo Acueductos y Alcantarillados (AyA) rector actual de este campo, así como el papel del Ministerio de Salud en cuanto al agua como recurso de vida y salud.

Las concesiones de agua potable que se den a las empresas privadas, serán entonces sólo decisión de ese Ministro, cambiando para ello el texto dictaminado en la Asamblea Legislativa producto de varios años de trabajo entre las organizaciones técnicas, no gubernamentales y las fracciones políticas.

El Minae no solo busca un cambio en lo señalado, que subordina y margina al AyA como representante del Estado y encargado de administrar el agua y el sistema de alcantarillados, algo que ha hecho bien desde su fundación y pese a la falta permanente de recursos; con ello se dejará de lado a las comunidades, en cuanto a establecer un orden de prioridades para el uso que se dará al agua en sus pueblos, lo que debilita la capacidad de administrar este recurso en forma democrática y justa.

Además creo se abre la posibilidad de explotar recursos hídricos en parques nacionales, lo que pone en riesgo el equilibrio de los ecosistemas de esas regiones.

Y por si fuera poco, elimina al departamento de aguas subterráneas y lo traslada a una instancia que funcionará como sociedad de una empresa, y además, se debilita con ello al Senara que tiene una función fundamental para preservar este recurso.

Creo que se impone que públicamente el Presidente del AyA, la Ministra de Salud y hasta el propio presidente Óscar Arias, nos den su posición en este cambio que afecta a todos los costarricenses.

Como ex ministro de Salud, sé muy bien el enorme papel que el agua ha tenido para los cuidados de la salud y la prevención de enfermedades en el país. De hecho yo les señalaba a las comunidades que el mejor médico que ellos podían tener, era poseer agua potable, y que sin esta, la aparición de enfermedades se multiplicaría.

Desde 1970 se inició en el Ministerio de Salud el programa de perforación de pozos de agua potable en los pequeños pueblos, y que luego se continuó con AyA en forma de acueductos rurales y que cubren el 90% del país. Precisamente esa ha sido una de las conquistas fundamentales en el área de salud y uno de los motivos por los cuales tenemos índices de salud de país desarrollado. Por eso, ha sido posible llevar el agua potable a las comunidades rurales pobres y a las áreas marginadas de las ciudades.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló en este año, que el agua potable en los pueblos impide la aparición de un 10% de enfermedades y un 6,3% de todas las muertes. Sabemos que en un acto de solidaridad y equidad pagamos el agua todos los que podemos, para que el Estado pueda mediante el AyA proporcionársela a quienes no tienen recursos. Eso es hacer justicia y nos hace mejores ciudadanos a todos. Por favor señores diputados, no trasladen el agua al Minae.

(La Prensa Libre)

Columnista huésped | 18 de Julio 2008

5 Comentarios

* #9287 el 18 de Julio 2008 a las 06:57 PM Rogelio Arce B dijo:

Excelente artículo del Dr Jaramillo, quien es uno de los grandes meritos de las ciencias de este país. Creo que debemos ponerle particular atención a este grito, antes que sea demasiado tarde.

* #9356 el 19 de Julio 2008 a las 01:02 PM Alvaro Suarez dijo:

Dr. Jaramillo, de los arrepentidos es el reino de los cielos. Lástima que haya estado apoyando el TLC, afirmando que no tendría efectos negativos para la salud de los costarricenses. Ojalá se cumpla el refrán, : NUNCA ES TARDE CUANDO LA DICHA ES BUENA, o aquél otro : NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA

* #9362 el 19 de Julio 2008 a las 03:56 PM Rafael Angel Morales Monge dijo:

Que funesto. Los Arias y su grupo oligarquico constituyen un mal apocaliptico para nuestro país y nuestro pueblo. ¿Se podrá hacer algo? Parece inevitable. Así lo hacen ver las circunstancias presentes. Alianzas diabólicas; corrupción; liberalismo económico insensible, que ni migajas deja caer de sus mesas.

* #9459 el 21 de Julio 2008 a las 11:52 AM José Rodríguez R. dijo:

Cada vez más me “sorprendo” de las políticas del gobierno de los Arias en todos los campos. De verdad es preocupante ver la forma en que gobiernan un país como si fuera una de sus empresas privadas, donde el valor comecial es el bien superior y no el ser humano. No podemos cruzarnos de brazos ante este nefasto gobierno, debemos actuar y ser concientes de que la peor desgracia que le ha podido ocurrir a nuestro país es haber caído en las garras rapaces de los “hermanitos” Arias. La historia lo juzgará…

* #9482 el 21 de Julio 2008 a las 09:50 PM Alberto Chaves Cordero dijo:

He leído el comentario que a modo de llamada de atención hace el Dr. Juan Jaranillo Antillón ex -Ministro de Salud, con respecto a la privatización del agua y las consecuencias negativas que esto conllevaría en la salud y el desarrollo de la vida, no podía esperar menos de una persona ilustre como el Doctor Juan Jaramillo Antillón, que en el período 1982-1986 sacrifico su profesión y vocación para servir al país, que tanto ha necesitado del concurso de personas que quieran poner su vocación y sabiduría al servicio de esta nación. Por eso creo de gran altura su análisis y llamado de atención, sobre un tema tan importante y de actualidad, del cual el Doctor Jaramillo maneja en forma magistral y argumenta en forma categórica que de disponibilidad sin restricciones depende el futuro de la nuestra vida y salud.

De todos es sabido que las próximas guerras ya no serán por mantener el control sobre la comercialización del petróleo, como ha ocurrido hasta la fecha, debido a que este producto ya no será de interés, porque de seguro a muy corto plazo no estará disponible para uso comercial en el planeta, las próximas guerras serán por el control y disposición del agua, líquido precioso del cual depende la biodiversidad, que nuestro país conserva, y tiene para el disfrute de quienes nos cobijamos bajo este cielo, y cuyo derecho gracias a la sabiduría de nuestros legisladores visionarios, lo consagraron en nuestra Carta Magna, como ley de la república para proteger su uso, y que hoy algunos “vivillos” pretenden privatizar, para beneficiar sabe Dios ¿a quién y con que intereses?

La destrucción del medio ambiente en los países industrializados es tan alarmante que a muy corto plazo, ya se presentan sus efectos negativos y repercusiones en el medio ambiente, los desiertos se irán cada día ensanchando debido al calentamiento global, y algunos pocos países serán los que puedan sobrevivir a esas crisis. El nuestro es uno de esos oasis que tendrá el planeta en un futuro no muy lejano, hace unos pocos días La National Greogarfic describió nuestro país como “el paraíso terrenal” y sin duda que así lo es.

Quienes hemos tenido la dicha de poder viajar dentro de nuestro territorio sabemos que es todavía mucho lo que debemos conservar, la belleza de nuestras montañas y el tesoro que estas guardan en sus entrañas, son la envidia de las grandes potencias que en su voracidad para acrecentar su poder económico, no han medido el impacto en la biodiversidad del planeta y hoy sus territorios son tan oscuros como el futuro que les espera, debido a la contaminación del aire, en sus ríos ya no existe el espacio para el desarrollo de la vida, esos territorios pronto serán grandes extensiones desérticas, sus moles de concreto se calentaran tanto, que no soportarán la vida, sus habitantes buscaran el refugio hacia territorios como el nuestro, de hecho ya esas transnacionales poco a poco han ido adquirido grandes extensiones en el país.

Nuestras costas hoy son propiedad de consorcios extranjeros que controlan sus principales accesos, aquel paseo para acampar en la playa a la luz de la luna, que posiblemente enamoró a don Héctor Zúñiga en su “Amor de Temporada” ya no es posible, hoy la mayoría de las playas tienen su acceso restringido, como por ejemplo Conchal, Tamarindo, Sámara y el Coco, no están al alcance de personas de escasos recursos, si bien la prohibición no es implícita, de hecho si es real, porque el hospedaje es inalcanzable producto de sus altos precios. La desaparición de los pequeños albergues que sus anteriores dueños costarricenses disponían para arrendar a bajos costos y las zonas no construidas inclusive se prestaban para acampar a las personas de bajos recursos, para su disfrute, posiblemente Don Héctor fue uno de esos tantos que se sentó a la luz de esa bella luna en la playa de mar azul que inspiro su melodía.

Pero ya no solo la tierra o la arena de la playa les basta, ahora quieren también llevarse a sus complejos turísticos y habitacionales, el agua de los bosques aledaños donde se encuentran los poblados de los costarricenses y de esta forma surtir sus emporios hoteleros que requieren tanto líquido, disponerlo a su antojo para su beneficio, poco les importará la vida de los lugareños a los que de seguro se les impondrán precios muy altos por el preciado líquido, que es nuestro patrimonio, y además un derecho para los nacidos en este paraíso, que dispuso, nuestro paraíso terrenal. Recurrirán para cristalizar sus propósitos a la presión por medio de los tratados de libre comercio “TLC”, que no es otra cosa que entregar nuestra soberanía, como ya lo han hecho en otros países. Manifiesta el Dr. Jaramillo Antillón en su artículo que “El Ministro del Minae pretende que se le cambie de nombre a su ministerio llamándole “Ministerio del ambiente, El Agua y la energía, y que a él, se le dé el poder de fijar las políticas y las decisiones sobre la explotación y el empleo del agua potable del país.” y no conforme con ese poder también pretende según sigue manifestando el Dr. Jaramillo “ eliminar el papel tan importante que ha venido cumpliendo Acueductos y Alcantarillados (AyA) rector actual de este campo, así como el papel del Ministerio de Salud en cuanto al agua como recurso de vida y salud. Las concesiones de agua potable que se den a las empresas privadas, serán entonces sólo decisión de ese Ministro,” o sea; todo el poder concentrado en manos de un solo funcionario, que en las anteriores administraciones y lo que va de la presente, no han demostrado tener en su cargo la capacidad para un puesto de tanta importancia. Carentes de controles nuestros bosques se siguen talando en forma indiscriminada, los ríos y nacientes son contaminados por las grandes transnacionales con la complicidad de los entes encargados, por ejemplo “Las Compañías Piñeras” que se han denunciado hace algunos días por las comunidades en las cuales están asentadas y lo que se ha dicho es que cuentan con todos sus papeles en regla. Con la excusa de ahorrar tiempo y recursos, se pretende, según estos sabios desentrabar los trámites que deben realizarse con el concurso de otras instancias, centralizando una decisión tan importante en un solo funcionario, pueda que posea la capacidad, no lo dudamos, pero; decían nuestros abuelos que “dos o tres cabezas piensan mejor que una”, con el concurso de otros criterios la decisión será sin duda la más acertada, sería mejor esperar un poquito más de tiempo en los trámites, que entregar a la ligera nuestros derechos. Hace algunos días a solicitud de dos familias de La Alta Talamanca realice una gira a la Zona de Grano de Oro Turrialba, donde se encuentra la última frontera o como le llamaron ellos al último potrero, punto desde donde por sus triíllos estos emprenden su regreso a las entrañas de la Cordillera de Talamanca, esperaba traer en mi retina al regreso, una imagen diferente de la belleza impregnada en las montañas donde habitan la mayor parte de nuestros ancestros indígenas, pero no fue así, ese día me lleve la desilusión más grande que pueda sentir un enamorado de nuestra naturaleza, sería el destino que me dio la oportunidad de llegar a ese lugar, distante 100 Km. de la capital, donde se encuentran ubicadas las cómodas oficinas de los funcionarios, a los cuales por encargo del pueblo, les fue otorgado de manos del señor Presidente de turno, el honor de cuidar nuestro patrimonio biológico, pero allá en el habitad de los indígenas, no se ve el reflejo de las acciones preventivas para conservar el medio ambiente. Para constatar en el campo les invito a los costarricenses para que realicen ese maravilloso viaje, en un vehículo 4x4 y constaten con sus propios ojos la realidad, no se queden con las imágenes que nos presentan los Telenoticieros desde el aire, cuando realizan sus visitas en sus helicópteros para promocionar las campañas de bien social, que son muy loables en bienestar los habitantes de esas montañas. Nunca su objetivo ha sido investigar e informar ¿que sucede en ese lugar y el por qué los indígenas cada día se adentran más en las montañas? ¿Y por qué este ha sido su diario vivir desde hace 500 años?, cada día su territorio se reduce más y más, no hay duda que desde el aire es posible tener un panorama más amplio, si se quisiera informar, pero que intereses tan poderosos no lo permiten. Al emprender el viaje se observa el panorama normal que presenta la mayor parte de nuestro territorio, hasta Tayutic la mano del hombre a destruido la naturaleza para extraer de la tierra su alimento y otros productos, por lo menos les dan mantenimiento a sus fincas y parcelas, pero; desde la Icotea o Jicotea hasta Grano de Oro, se puede apreciar la acción criminal del hombre que ha destruido esos bellos bosques primarios para la extracción de maderas preciosas, luego algunas porciones de esas zonas taladas, se reparten como parcelas a agricultores la gran mayoría fueron luego sembradas de café, hoy están abandonadas. Otras lomas y cerros fueron reforestados con especies que no son autóctonas de la zona y más bien son perjudiciales para la tierra, como por ejemplo el Pino en sus distintas variedades, a la vera del camino se pueden apreciar las placas de la empresa que lleva adelante ese proyecto de reforestación, posiblemente quienes las talaron y hoy quieren enmendar su error.

en la gráfica anterior podemos observar una planta de café en una de esas parcelas en estado de abandono que posee una altura aproximada de 6 metros. El río caudaloso que obligó en el pasado a construir el puente colgante, poco a poco ha reducido el caudal, sus cerros aledaños fueron talados hasta la orilla del río, desde este punto se inicia un ascendente camino hacia las crestas de los cerros despobladas de árboles, la mayoría fueron talados, solo algunos pocos se resisten y son testigos mudos del holocausto y el maravilloso pasado.

El camino es bastante bueno y desde el se pueden observar a lo lejos las crestas de cerros que ya se comienzan a destaparse, esas tierras posiblemente no son aptas para el cultivo que el hombre quiere darles, por ese motivo luego son abandonadas con el daño ocasionado a lo que el Divino Creador dejó para el disfrute nuestro y de nuestros descendientes.

Grandes acumulaciones de aserrín cubiertas de maleza al fondo cerros talados. Siguiendo el camino al lado derecho se pueden apreciar acumulaciones de aserrín que semejan pequeñas lomas cubiertas de maleza, donde posiblemente funcionaron aserraderos ambulantes. Más adelante ya cerca de la entrada de Grano de Oro pudimos observar un pequeño aserradero instalado en una construcción temporal que posiblemente luego será trasladado a otro lugar, para no tener que acarrear las tucas, luego de aserrar la madera, esta es trasladada a la capital y sitios de venta, quizá ese el motivo por el cual se ha dado una disminución de camiones madereros con las tradicionales tucas hacia los aserraderos del centro de la ciudad. Al llegar a nuestro punto de destino pudimos observar una bella planicie rodeada de pequeñas lomas, de cientos de hectáreas de extensión, que fueron taladas en el pasado y ahí se encuentra la comunidad de Grano de Oro, que ocupa una pequeña porción de esos terrenos, luego el camino rodea una gran extensión de tierras planas donde se encuentra asentada una hacienda ganadera de alto potencial de producción.

En la gráfica anterior pueden observarse todavía algunos troncos que se resisten a morir en los terrenos abandonados. Hasta ahí hay 100 km. de recorrido de camino en muy buen estado, esto denota que en poblado hay intereses poderosos para desarrollar grandes proyectos empresariales. De camino observamos y fuimos acompañados por vehículos del ICE, el MAG, ICAFE y algunos autos lujosos doble tracción. En la siguiente gráfica se pueden observar sobre nuestros vehículos los cables de electricidad y el posteado que sigue tierra adentro.

Ya en el poblado de Grano de Oro los indígenas que pronto partirían montaña adentro a sus ranchos donde viven su vida sencilla con el fruto de lo que les provee la montaña.

Su mirada refleja el dolor de ver perderse su habitad que poco a poco se va reduciendo en las faldas de bellas montañas se pueden observar a simple vista pequeñas parcelas que poco a poco van talando hasta despoblar de ese bello forraje del cual emerge el liquido precioso que da vida a nuestro planeta, ¿Si el panorama nosotros lo pudimos observar a simple vista desde la vera del camino, por qué los funcionarios encargados de vigilar la conservación, no lo ven, o se hacen de la vista gorda? ¿Será acaso más importante establecer retenes en las carreteras para decomisar los productos extraídos? ¿No será acaso más importante vigilar y prevenir el daño antes de ser ejecutado?

Nuestras interrogantes 1- ¿Por qué tanta extensión de tierra despoblada? 2- ¿Por qué motivo los indígenas se adentran hacia esas lomas inhóspitas, si ellos fueron quienes primero poblaron esta planicie? 3- ¿Por qué hoy son unos pocos quienes viven en las pocas casas que tiene el poblado? 4- ¿Con que criterios se dispusieron estas tierras para ser explotadas en las actividades que hoy presentan? 5- ¿Por qué los indígenas deben pagar su estadía en los albergues que ahí se disponen, para luego emprender el viaje, ya sea de ida o de regreso? 6- ¿Por qué no se protegieron los pocos riachuelos que se encuentran en el lugar a esa altitud? 7- ¿De quién es la responsabilidad de proteger ese territorio nuestro patrimonio, del cual nos habla maravillas La National Geografic en su documental “Paraíso Terrenal?” 8- ¿Qué han estado haciendo los funcionarios encargados de la protección del medio ambiente?

Son muchas las interrogantes y posiblemente no tengamos respuesta, entonces creemos que tiene mucha razón don Juan Jaramillo Antillón en su preocupación por el ente al cual se pretende por ley dar la potestad absoluta de dispones en materia de aguas, o sea, disponer del destino la vida en nuestro territorio, nuestro territorio. lo que debilita la capacidad de administrar este recurso en forma democrática y justa.

A manera de reflexión hacemos nuestro aporte ya que también nos preocupa al igual que el Dr. Jaramillo el destino de nuestros hijos y demás descendientes, con todo respeto para ustedes. Alberto Chaves Cordero. Cédula 3-234-933

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