Escuché una conferencia de Orville Schell, uno de los grandes especialistas de hoy sobre China. Y pensé: nuestro gobierno tiene muy claro lo que es la China pero ¿y los demás ticos? Aquí van algunos datos importantes de la conferencia de Schell.
China es un gran país, tiene 1,3 billones de habitantes y además en cosa de quince años sacó a 200 millones de la pobreza.
Después de milenios de tradición, en 1949 China se lanzó a la utopía comunista. Por décadas el estado dio trabajo, casa, estudios, seguro social y entierro a los habitantes. Ya no. Den Xiao Ping inició la contrarrevolución y la seguridad social quedó desmantelada. En cambio, el país tiene tasas anuales de producción y crecimiento de 17% y 12%, respectivamente. Sin embargo, dice Schell, sus problemas ambientales son tan enormes que entre un 8% y un 12% del P.I.B. debería darse por nulo. Es decir, en términos de recursos, su desastre ambiental cancela su crecimiento.
Según Schell, parece que un 75% de sus lagos y ríos están tan contaminados que ni siquiera sirven para uso industrial. De las 20 ciudades más polucionadas del planeta, 16 están en China. Sufre de desertificación y deforestación intensas. Un 30% del país tiene lluvia ácida por el exceso de automóviles y por el carbón, su principal fuente energética. Algunos dicen que cada semana se abren una o dos plantas nuevas de carbón, las cuales producirán durante treinta años, aumentando terriblemente el calentamiento global.
Cuenta este especialista que en algunas partes de China se puede manejar por cinco días seguidos sin ver el cielo. Sólo se ven botaderos tóxicos, plantas de carbón, plantas industriales y cientos de fábricas de cemento que llenan de polvo un aire que ya era gris por las cenizas.
Políticamente, China es un país en transición y por eso las reglas del capitalismo no funcionan bien. Además, entra al mercado justamente cuando las reglas están debilitadas o distorsionadas por el capitalismo salvaje.
Schell observa que en China no hay mercado de capitales ni un verdadero sistema bancario.
Después del ambiente, el principal problema es la corrupción. No porque los chinos sean malos, sino porque con la revolución todo se nacionalizó y al entrar el capitalismo, esos activos del estado pasaron a valer millones. Los funcionarios que los cuidan están mal pagados y entonces hacen negocios privados con ellos. La mayoría de negocios en China los acaparan funcionarios de las instituciones del estado, del partido, etc. ¿No ha oído hablar de los enormes negocios del Ejército Rojo? Una se pregunta después de oír a Schell: ¿con quiénes en China estarán haciendo negocios los políticos-empresarios de Costa Rica?
(Página Abierta - Diario Extra)
Anacristina Rossi | 17 de Abril 2008
1 Comentarios
En realidad China tiene 1,3 millardos de habitantes. Ya es un país suficientemente poblado. No es necesario exagerar acerca de cuánta gente tiene.
Según la Real Academia: billón es “Un millón de millones, que se expresa por la unidad seguida de doce ceros”.