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Un vasto y enjundioso an�lisis de la Guerra Patria

Columnista huésped | 10 de Noviembre 2007

Clar�n patri�tico: la guerra contra los filibusteros y la nacionalidad costarricense Juan Rafael Quesada Camacho Museo Hist�rico Cultural Juan Santamar�a, 2007

Por Alfonso Chase

El Dr. Juan Rafael Quesada Camacho es un historiador ampliamente conocido en nuestro pa�s como escritor de textos fundacionales, profesor, catedr�tico y promotor de temas, de gran vigencia ciudadana, en sus m�ltiples art�culos editados en su larga carrera acad�mica. El presente libro ha sido editado por el citado museo, con la cooperaci�n del Ministerio de Cultura y Juventud y el Colegio de Licenciados y Profesores en Letras, Filosof�a, Ciencias y Artes de Costa Rica.

La reedici�n del Clar�n Patri�tico, op�sculo con canciones y poes�as, compuestas en Costa Rica en la guerra contra los filibusteros en 1857, por el compilador Tadeo Nadeo G�mez, de nacionalidad guatemalteca, sirve al autor para lograr darnos un vasto y enjundioso an�lisis de la Campa�a Nacional, en tres cap�tulos y una conclusi�n, que lo convierte en uno de los textos fundamentales para comprender el valor y significado de la gesta y a la nacionalidad costarricense como una construcci�n colectiva en cotidianeidad y combate. No conozco otro libro que logre sintetizar los antecedentes de la Guerra Patria, su discurrir como �pica y l�rica tambi�n, m�s la importancia hacia el futuro de la citada recopilaci�n, por la lectura que tienen sus textos, escritos en tan reciente fecha de lo acontecido, y como legado para todo nuestro pueblo. El autor define, con propiedad, inteligencia y claridad la importancia de la gesta patri�tica, dando al op�sculo un valor real e ins�lito, para entender qu� qued� reflejado en los textos, as� como la historia fluyendo para construir una estructura social, rescatada como manifestaciones art�sticas embrionarias de numerosos ciudadanos costarricenses y el celo del compilador por dar forma a la historia de su tiempo.

El an�lisis del texto se convierte en un estudio muy importante sobre la guerra patria, despejando el autor algunas dudas del pasado y dando forma a la historia de la forja de la patria, tal como la conocemos en este tiempo, haciendo importantes los sucesos que construyen la validez de la misma, tenida por el suceso m�s importante en el campo c�vico, militar, hist�rico y hasta geogr�fico y territorial, todo escrito con amenidad y sentido de la comunicaci�n entre autor y lector.

Para el estudioso de los temas de la Campa�a Nacional, este libro tiene la ventaja de que, por su poderoso poder de s�ntesis, nos da un panorama de asuntos que han sido sujetos de discusi�n y an�lisis en los �ltimos meses, sobre el Destino Manifiesto, por ejemplo, o los alcances de los prop�sitos de expansi�n de ciertos sectores del gobierno norteamericano, hacia lo que ahora se conoce como la tercera frontera, tal como fue el proyecto de los invasores.

Pero lo realmente sustancial es el inter�s por mostrarnos el proceso de la forja del ser costarricense, como un prop�sito colectivo que se propone del pasado hacia el futuro. La participaci�n de diversos sectores en la lucha contra los filibusteros muestra, gracias a los estudios de Quesada, que fue un proyecto nacional con ra�ces y fondo en el hero�smo, la solidaridad y en el caso de Clar�n Patri�tico la expresi�n de sentimientos y de visi�n creativa, para celebrar los hechos y la participaci�n de los h�roes en la victoria. El op�sculo original sirve a nuestro autor para dar forma a un estudio muy completo sobre diversos aspectos de su edici�n, pero sobre todo para establecer sustento a la memoria colectiva de los costarricenses. La reproducci�n del texto original, en versi�n facsimilar, completa tambi�n una impresionante bibliograf�a y las notas, que bien pueden leerse como un texto paralelo, llenas de detalles y de colorido informativo. Un libro que da brillo a la labor hist�rico-pedag�gica de uno de nuestros m�s sustanciales acad�micos, promotor y difusor de la herencia cultural de nuestro pa�s.

(La Prensa Libre)

Columnista huésped | 10 de Noviembre 2007

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