“D�game, Varguitas: �y ahora qu�?”. Digo, para empezar, que el Gobierno (el S�) gan� inapelablemente. Sin embargo, por segunda vez en 18 meses dej� los pelos en el alambre, o quiz� hasta m�s. Ojal� que, pasado el susto, no se le diluya la voluntad expresada de dialogar y no se refugie en su cueva all� en el Olimpo. O crea que puede ignorar al PAC y la oposici�n extraparlamentaria, y seguir apostando a su maltrecha coalici�n de los 38.
Don �scar y Don Rodrigo: la Magdalena no est� para tafetanes. Su desaf�o es desencadenar, veinte a�os despu�s, nuestro plan de paz (Esquipulas) interno –y con la misma paciencia y perseverancia–.
En la otra acera, ojal� que los del NO, por segunda vez consecutiva, no se metan en el berenjenal de las denuncias electorales. Nada sacan de ah�, excepto perder capital pol�tico ante la ciudadan�a, enardecer el ambiente, instalar un discurso deslegitimador y, sobre todo, dejar pasar la oportunidad de negociar fuerte y bien. Perdieron, por poquito y por las razones que sean, pero perdieron. Punto. Realismo pol�tico necesitan, y no invocaciones a resistencias numantinas.
No crean que los comit�s patri�ticos mantendr�n su activismo: eso no se logr� ni en la Argentina “poscorralito” del 2002. No jueguen con fuego.
“Muy bien, pero usted no ha respondido: �ahora qu�?” Ahora se vendr�n un mont�n de apelaciones al di�logo nacional, algunas tan poco honestas como monedas de cobre, y con la �nica intenci�n de decirle a la ciudadan�a: “Ven, el otro es el malo, el que no quiere di�logo y, por tanto, se les pas� el chance y no voy a dialogar. Ahora voy solo por lo m�o”.
Este escenario es altamente probable por varias razones: porque el Gobierno ha mostrado poca cintura (como dicen: m�s cintura, una gallina), porque el PAC y la oposici�n extraparlamentaria han mostrado poca cintura (�dem), y porque el PUSC y el Libertario necesitan desmarcarse del Gobierno. Adem�s, siempre hay desenfocados de esos que “resistiremos hasta el final” o “pa’eso ganamos”.
“S�, pero, entonces, qu� hacer: conteste de una buena vez, por favor.” Propongo a los del S� y a los del NO la estrategia del zipper: por cada dos leyes de agenda de implementaci�n, se pasan una o dos iniciativas de inter�s del NO. En esto, el NO tiene mucho de donde escoger si se pone constructivo. Todo en un paquete de dando y dando. Adem�s, propongo un zipper con seguro, por aquello de que la jareta quede abierta, lo cual siempre es de mal gusto: que las �ltimas leyes que se aprueben sean las del ICE y las del INS, as� garantizamos que sean potables para las partes involucradas. El domingo 7, el pueblo dio una lecci�n a la clase pol�tica: es hora de que ella est� a la altura.
(La Naci�n)
Jorge Vargas Cullel | 11 de Octubre 2007
1 Comentarios
�Ay Varguitas!, si�ntese usted a esperar que por cada 2 leyes de implementaci�n van a pasar 2 iniciativas de inter�s del NO. Adem�s �ha estudiado usted el Tratado de Budapest y las connotaciones �ticas tan graves como el patentamiento y desecho de microorganismos? (Microorganismos pueden ser embriones humanos) �Se debati� ese “detallecito” antes del refer�ndum? Obviamente NO, de haberlo hecho m�s curas y pastores habr�an repudiado el TLC…
Con excepci�n del siempre tristemente c�lebre Claudio Solano, quien con tal de compartir la mesa con el poder econ�mico y el poder pol�tico, no dud� en apoyar lo que desconoce o no le interesa porque debe ser muy bonito para �l remozar su imagen en la Tele y los peri�dicos, dando la bendici�n al nefasto TLC. Ya bastante da�o hizo mediatizando al Solidarismo, ahora lo pretende hacer con el resto del pa�s.
Y Varguitas todav�a creyendo que el zipper va a funcionar, cuando la arrogancia se encargar� de trabarlo…
�Todav�a no se ha dado cuenta que con tal de pasar la prueba el gobierno como adolescente en secundaria se rob� el examen y pas� raspando? Pero “pas�” el TLC!