Por David Eduardo Solano Chaves, presb�tero - [email protected]
Hemos llegado a un punto de nuestra historia que ser�a �nfimo si lo consideramos desde una perspectiva mucho m�s global, pero es un punto que en el cara a cara nos mueve a pensar, a decidir.
Al fin y al cabo, la vida diaria est� compuesta de decisiones que tomamos en su mayor�a despu�s de pensar aunque sea un milisegundo. As�, por ejemplo, decidimos qu� tomar al desayuno, si jugo de naranja, t� o el caf�; decidimos qu� ropa vestimos en el d�a; decidimos c�mo y con quien relacionarnos.
Muchos han escrito en otros lugares que quienes pensamos en votar por el NO nos oponemos al progreso, al desarrollo. A ell@s y a tod@s les invito a leer unas p�ginas del libro de Salvador Giner, Teor�a Sociol�gica Cl�sica, Editorial Ariel, pp. 26-28. Me parece clar�simo donde el autor expresa que el progreso (o desarrollo) debe tener al menos tres dimensiones, la material, la social, la moral. Escribo esto porque entre esos que piensan que me opongo al desarrollo, hay un “prejuicio” o “precognici�n” al decir de Durkheim, cual es que el progreso se refiere solo a la esfera material. No me opongo a que el desarrollo involucre, y de hecho los hace, a la esfera material, pero para que sea humano y humanizador deben un�rsele las otras dos dimensiones: la social, porque nadie puede decir que vive totalmente aislado pues al estar frente a una computadora escribiendo mails ya nos pone en relaci�n aunque sea con un “t�” virtual, porque toda persona es un ser relacional, y la moral por cuanto nuestras acciones, por peque�as e intimas que sean, todas tienen y conllevan una valoraci�n sea de nuestra parte o de los dem�s.
No me opongo al progreso ni al desarrollo pero cuando leo sobre el TLC pienso… �es ese el progreso o desarrollo que quiero para mi pa�s, la “Suiza Centroamericana”?
No niego que el crecimiento econ�mico sea necesario, pero no lo es todo. Este “instrumento”, como han llamado much@s al TLC, es un instrumento de progreso material. �Y lo moral y lo social? �Ser� que don Mercado lo va a asignar? M�s de 20 a�os de confianza ciega en el mercado, con el neoliberalismo, sugiere lo contrario…
No me opongo al libre comercio pues es una din�mica de nuestro mundo actual. Pero s� me opongo a este libre comercio que se plasma en un TLC donde las desigualdad de las condiciones nos dejan en desventaja. Es, como dice un amigo, “entrar a la mejenga sabiendo que vas perdiendo 4 a 0 y te expulsan a los defensas”.
Me opongo a este libre comercio que no ve a las personas, ve mercanc�as incluso donde hay personas. Me opongo al libre comercio sin dimensiones �ticas o morales. Me opongo a toda estrategia que profundice las brechas entre ricos y pobres. Y no me opongo por una raz�n meramente “ideol�gica”. Me opongo porque la �tica cristiana que predico d�a tras d�a, y que trato de vivir siempre, me urge a pensar en el pobre, el hu�rfano y la viuda, en el despose�do… porque de los que son como ellos es el Reino. Me opongo porque creo que los valores del Reino se pueden hacer “top�a”, si nos tomamos en serio que todos somos hermanos. Me opongo porque si callo, ser�a c�mplice y no quisiera escuchar al final de mis d�as “lo que dejasteis de hacer a uno de estos mis peque�os hermanos a m� me lo hicisteis” (Mt 25).
Escribo estas notas mientras escucho el CD de Enya comprado en V�rtigo, s� en Multiplaza, desde una computadora que tambi�n compr� aqu� en Costa Rica, pero que a todas luces es importada, con aranceles y todo, pero la pude tener. Me tomo un jugo Sunfruit y pienso… �podr� satanizar al libre comercio? La respuesta es NO, porque NO lo hace la Doctrina Social de la Iglesia. Pero s� puedo llamar la atenci�n que este libre comercio tiene una intenci�n particular, que mueve a todo el sistema capitalista: la acumulaci�n de capital. Lo malo no es eso, es en manos de qui�n se acumula y se queda… Un TLC que no fue pensado para esas personas (m�s de un mill�n) que viven en Costa Rica en condiciones de pobreza, es un TLC que solo puede traer progreso para pocos, poqu�simos. Y pensar que la creencia y el ideal de progreso nacieron con la Ilustraci�n, la misma que impulsaba la libertad, la igualdad y la fraternidad…
Por eso, y si Dios me da el regalo de la vida, el 23 de setiembre dir� NO porque creo y vivo para que este pa�s sea diferente.
Columnista huésped | 13 de Mayo 2007
1 Comentarios
Si Presbitero David Eduardo Solano; el 23 de setiembre Usted dira NO; porque no quiere un cambio en este Pais. Al igual que el resto de dirigentes (sacerdotes) de la iglesia, no les conviene que el pais cambie; Ustedes viven bien, en la condiciones actuales en que esta este Pais. Porque que entonces cambiar el esquema? Pero lamentablente hay muchas personas como es mi caso que saldremos a decir SI, porque requerimos un cambiuo urgente en el esquema de desarrollo que requiere Costa Rica.