Por Alberto Franco Cao
Cuando estaba dentro de la Junta Directiva del INVU, me enter� por medio de algunos profesionales de dicha instituci�n, que un jefe de Urbanismo proclamaba a los cuatro vientos que por seguir en esa posici�n, no solo regalaba el sueldo, sino que pagar�a por ejercerla, era tal la cantidad de dinero que recib�a por permisos que iban contra todos los planes reguladores. En aquel entonces trat� de que se investigara a dicho funcionario, pero no fue posible, pese que hab�a muchos indicios de su delito.
Tiempo atr�s, cuando colaboraba incansablemente dentro del Partido Liberaci�n Nacional, en el tiempo en que �ramos un gran equipo de voluntarios y amigos, que prest�bamos nuestra colaboraci�n gratuitamente, porque hab�a una m�stica incre�ble dentro de los seguidores, en cierta ocasi�n que hab�amos ganado las elecciones para Presidente de la Rep�blica, lleg� un diputado muy allegado al electo Presidente y le dijo que dos diputados, me reservo el nombre de ellos, le solicitaban que los nombrara en una Junta Directiva de un Banco, que ellos regalaban todas las dietas al Partido o quien dijera el nuevo Presidente, este se sonri� y dijo: �Qui�n sabe qu� negocito tienen montado�, y nunca los nombr�. Algo parecido pas� en otra ocasi�n con un aspirante a Ministro de Obras P�blicas, y tambi�n se qued� esperando el nombramiento.
Esto de regalar el sueldo y hasta pagar por el puesto se ha o�do y se oye a todo nivel de la funci�n p�blica, pues en una ocasi�n o�mos a varios amigos como en una reuni�n comentaban unos oficiales de Tr�nsito, que ellos no solo regalar�an el sueldito, sino que pagar�an por seguir en el puesto. Entre m�s alto sea el puesto, pues m�s fuerte la renuncia al salario.
Si usted consigue vender todo el alcohol a la F�brica de Licores, aunque la f�brica pierda muchos millones por dejarlo de producir, pero todo ese capital va para sus compa��as privadas, �para qu� quiere recibir un pinche giro de Gobierno? Si usted tiene posibilidad de que sus compa��as entren en el negocio con las transnacionales de telefon�a m�vil o fija podr� regalar no solo el salario, sino los gastos confidenciales, m�nimo. Si logra hacer negocios con la aseguradoras (muchos dentro de la Casa Blanca), entonces puede seguir viajando por el mundo �aconsejando� a quien le ponga atenci�n, y despreocuparse de este �nfimo pa�s, con un gobierno s�per enano, para no ser muy ego�sta el negocio de las medicinas -que es bastante grande- que se lo repartan algunos allegados que usted tenga como pilares.
As� ver�n ustedes, que regalar el sueldo no es una buena nota, ni una buena se�a. �Lograr� todo esto? �Qu� preguntas!
Ahora quiero pasar a otra actuaci�n de algunas diputadas. Lo primero que debe saber una se�ora, que quiso ser diputada a la Asamblea Legislativa, es que est� en pol�tica, que cuando le hacen cargos por malas actuaciones, contribuciones dudosas o algunas cosas indebidas del partido pol�tico a que pertenece, no le est�n faltando el respeto a ella como dama y est� en la obligaci�n de aclarar o si es dif�cil defender el cargo callar, pero no escudarse en el hecho de llevar �faldas�. Tanto al diputado var�n como a las damas se les debe respetar su vida privada y sobre todo si es anterior al cargo, pero la parte pol�tica es igual para el hombre diputado, como para la mujer diputada, como dec�amos ante los chiquillos �el que se mete a jugar, tiene que aguantar�.
Me ha molestado ver c�mo se quiere humillar y presentar como un vulgar diputado a un representante del pueblo, porque le dice a una diputada que el partido de ella recibi� dinero de dudosa procedencia, entonces otra diputada en Comisi�n lo agrede de palabra y le amenaza con quitarle la palabra, porque ellas son mujeres. Se�oras, �l le est� hablando a una diputada, igual que el diputado, ustedes no pueden decir a esto falta de respeto.
Ahora ha salido publicado en varios campos pagados por unos estudiosos y preparados abogados de indiscutible honorabilidad, demostr�ndole a una diputada de Liberaci�n Nacional que ella no est� diciendo la verdad en cuanto a las consecuencias para Costa Rica del TLC, en dos platos demostraron que la se�ora diputada miente, si no, entonces ignora, o tal vez solamente es incompetente para interpretar el voluminoso TLC. Pero no les vaya a decir que le est�n faltando el respeto, por haberla exhibido escondiendo las �cartitas�.
�Oyeron ustedes o lo leyeron, a do�a Golda Meir, o a do�a Margaret Thatcher, diciendo no me falta el respeto porque soy mujer? No se�or, se enfrentaban en sus parlamentos de igual a igual con cualquier diputado. La pol�tica iguala los sexos en cuanto a encuentros pol�ticos y tambi�n en las guerras. No jueguen de pol�ticas y despu�s se defienden con las enaguas o vuelvan a las cacerolas del hogar o a la m�quina de escribir de la oficina privada.
Para recordar a una diputada costarricense que peleaba de igual a igual con cualquiera de diputada o de ministra, les menciono a do�a Estela Quesada, de Alajuela. Ella les podr�a dar un curso.
(La Prensa Libre)
Columnista huésped | 10 de Enero 2007
3 Comentarios
Adem�s, esa Diputada tambi�n “dona” sus dietas, porque como ella misma dijo “trabajar� ad-hon�rem”.
Ni tonta que fuera en aceptar un sueldillo de Diputada cuando tienen una pensi�n de lujo de m�s de 3 millones de pesos, que se le reducir�a si recibiera lo que corresponde como Diputada.
Otros gemelos tambi�n de los muy vivillos, consiguieron duplicar la pensi�n de uno de ellos con s�lo “un mes de servicio a la Patria”.
�C�mo podr� mi madre viuda aumentar su pensi�n de escasos cien mil colones, tras una vida de trabajo y contribuci�n de mi padre a la CCSS?
Excelente. Sencillamente excelente y sobretodo oportuno, porque ni m�s ni menos son personas que adolecen de conocimiento y de criterio, y temen quedar mal con su fracci�n, y se quiebran cuando se les demuestra su incapacidad.
La responsabilidac con el ejercicio no tiene nada que ver con el g�nero. Ser� tan responsable un lisiado, hombre o mujer con el papel que desempe�e en cualesquiera cargo, privado o p�blico.
Dime de que presumes y te dir� de que careces, reza el refranero. El fementido desprendimiento y la calculada piedad s�lo son recursos teatrales para impresionar incautos. La ayuda vale cuando es discreta y reservada. Lo dem�s es puro show. Como el de esa diputada que en un acto de “desprendimiento” no cobra las dietas… simplemente porque se apechuga una de las m�s grandes pensiones nacionales. �Toda una “chup�ptera”!