Por L�zaro Broitman Feinzilber
Winston Churchill, en su libro Consecuencia pol�tica, justifica la eventualidad mediante la cual un l�der pol�tico puede, manteniendo su ideolog�a y partido pol�tico, exteriorizar dos diferentes posiciones sobre un mismo tema. Evidentemente ello obedece a una necesidad de car�cter general de la sociedad a la que se debe. De manera contrastante, don Oscar Arias ha promovido una decisi�n pol�tica que contrasta con la ideolog�a de su partido y sus l�deres hist�ricos, y que ri�e abiertamente con la historia patria de sana y transparente relaci�n con el Estado de Israel.
Muchos costarricenses hemos buscado alguna justificaci�n por la cual el ahora Se�or Presidente, Oscar Arias S�nchez, desde agosto de 2002, ha venido insistiendo en el cambio de la embajada costarricense en Jerusalem y trasladarla a Tel Aviv, lo cual ha concretado desde esta semana a tan s�lo cien d�as de gobierno.
Quienes hemos seguido a don Oscar en sus campa�as pol�ticas o sugerencias partidistas, no nos explicamos c�mo, a�n cuando sea su derecho, ha materializado el criterio del necesario traslado de la Embajada en Israel de Jerusalem a Tel Aviv, y por qu� raz�n, por ejemplo, su opini�n no se refiere a otros pa�ses occidentales que han enfrentado, incluso al d�a de hoy, problemas de tipo independentista con o sin violaci�n de derechos humanos.
Es una realidad que en estos momentos en que la pol�tica occidental maneja intereses espec�ficos en temas del Medio Oriente, se impon�a mantener la corriente diplom�tica mediante la cual nuestro pa�s siempre ha sido un amigo incondicional de Israel. Con el respeto que se merece don Oscar, hoy amanecemos con la realidad de una decisi�n mal adoptada y en una �poca donde se impon�a una muestra de solidaridad y no de rechazo.
Muchos gobiernos costarricenses han pasado, incluso el presidido por �l, donde la Embajada se ha mantenido sin discusi�n en esta ciudad. Israel ha sido un pa�s que ha agradecido a los Gobiernos nacionales su solidaridad con el derecho de establecer como Capital la misma ciudad donde el juda�smo tiene justificaci�n hist�rica, y donde se ha respetado la libertad de culto para otras religiones como la cat�lica y la musulm�n. Las muestras de agradecimiento por esta actitud ejemplar de nuestro pa�s, se han visto en programas de colaboraci�n en ciencias agr�colas, seguridad y tecnolog�a, adem�s que existen bosques con el nombre de ilustres pol�ticos costarricenses, una tradici�n israel� que reconoce y honra con la siembra de �rboles para las personas que han velado por la amistad con este Estado democr�tico.
Goethe dijo una vez que �El que sabe aprovechar la ocasi�n, ese es el hombre oportuno.� Yo me pregunto: �cu�l ser� el justificante para que don Oscar haya externado su opini�n precisamente en el 2002 y ahora de manera perentoria ya la materializa? O ser� mejor decir �habr� existido una raz�n por la cual don Oscar haya cambiado la pol�tica costarricense hacia el Estado de Israel? Si como establec� l�neas atr�s pudi�ramos inferir que don Oscar liga el tema de la Embajada con el tema del actual conflicto b�lico, �ser� que los pa�ses del bloque �rabe han realizado alg�n tipo de acercamiento con don Oscar para alg�n fin espec�fico o viceversa? O m�s bien y brind�ndole a don Oscar el beneficio de la duda �ser� que trasladando la Embajada a Tel Aviv se mejorar�an nuestras relaciones con el Estado de Israel? Pong�monos de acuerdo en que cualquiera que sea la posici�n que se asuma, don Oscar ha alborotado el mar en el cual no hab�a ninguna tempestad.
Lo que se ha producido es una afectaci�n a la imagen nacional frente a los israel�es, que cambia lo que ha sido una pol�tica de muchos decenios. Muchos de quienes hemos apreciado el nivel de inteligencia y credibilidad que don Oscar le ha dado el rango de ser uno de los ex presidentes m�s admirados, hoy nos sentimos tristes por su acci�n y por contrastar con el pensamiento costarricense defendido por l�deres como don Jos� Figueres Ferrer, Luis Alberto Monge y el presb�tero Benjam�n N��ez, entre muchos otros. As� las cosas, si bien como pol�tico y siguiendo a Churchill, es derecho de don Oscar cambiar de opini�n, me parece que la misma no obedece a un inter�s general de la sociedad costarricense, ni mucho menos a una situaci�n que nada la relaciona, como lo fue en el pasado el conflicto palestino-israel� y ahora el enfrentamiento de este pa�s con la guerrilla terrorista de hezbol�.
El pecado de don Oscar ha sido, acudiendo a S�neca en que �m�s a menudo nos dejamos guiar por la opini�n que tenemos de una cosa, que no por la realidad misma de ella�. Por ahora, valga un Oscar para don Oscar, por haber materializado en realidad una idea suya que distancia eventualmente la inmejorable y cercana relaci�n diplom�tica y afectiva entre dos Estados, y que absolutamente en nada beneficia al Estado costarricense ni a su sociedad y su inter�s general en el tema. Don Oscar ha materializado su opini�n del tema con desprendimiento de la realidad del pensamiento de la sociedad que representa como Presidente. Muy lamentable.
(La Prensa Libre)
Columnista huésped | 19 de Agosto 2006
2 Comentarios
M�s all� del acierto diplom�tico que esta decisi�n involucre, lo verdaderamente lamentable es el momento en que se hace. Ya el terrorismo modific� los resultados de las elecciones en Espa�a y hoy, en esta coyuntura, cuando Hezbol� se ha apuntado una victoria -que ellos no miden por la cantidad de muertos, sino por las migajas que diplom�ticos ambiguos les tiran-, cuando Israel necesitaba muestras de simpat�a, se viene don Oscar con este golpe bajo.
Recuerdo cuando Espa�a retir� sus soldados de Iraq. �El motivo? la espantosa versi�n del Septiembre 11 en la estaci�n de trenes de Antocha el 11 de marzo de 2004. El pueblo espa�ol y el entonces candidato Rodr�guez Zapatero, (ZP, Zapatero Presidente, como rezaba su slogan de campa�a), fueron a las urnas con ese trauma a cuestas. Ese sentimiento paralizante que corta la respiraci�n, y hace colapsar los nervios, y que los terroristas manipulan con arte endemoniado, alter� visiblemente la �voluntad� del electorado espa�ol. �Comprensible? S�. Tan comprensible como el terror que obliga al pago de un rescate por la vida de una hija o un padre. Tan comprensible como el terror de la virgen que cede ante el desalmado ladr�n de su honor.
Lo que no es comprensible es la absoluta falta de tacto que el presidente Arias ha exhibido ante Israel, esa �naci�n admirable�, como �l mismo la califica. Dice que por un asunto de legalidad internacional, ha decidido mover la misi�n diplom�tica costarricense de Jerusal�n a Tel Aviv. En una imperdonable redundancia que no deja de ser una horrible concesi�n a los enfermizos motivos del terror, al querer situar su decisi�n en el tiempo, dice: �Hoy� cuando despreciables formas de terrorismo�� Oh, es que lo de Nueva York, Madrid, Londres, Bombay, etc., etc., son solo �formas�, �De qu�? �De negociar? �De inclinar elecciones y cambiar cedes diplom�ticas?
Diplomacia in�til. A veces la diplomacia adopta formas muy sutiles de hipocres�a, iron�a y descaro. En su columna de La Rep�blica del 17/8/2006, don Alvaro Madrigal nos recordaba que Costa Rica estuvo al borde del precipicio, cuando, bajo el mandato de don Rodrigo Carazo Odio, el pa�s no escatim� su apoyo al sandinismo. Dinero, armas y hasta una radio clandestina que operaba desde la finca La Lucha, seg�n Sergio Ram�rez, fueron parte del �apoyo moral� que transit� por el territorio nacional. Lo que salv� al pa�s, razona don Alvaro, fue el aislamiento y desprestigio en que cayo el r�gimen somocista.
Y es que la diplomacia es indiferente, autista y desleal seg�n la inmediatez de sus objetivos. Es por eso que los argumentos de don Oscar no convencen. �Resoluciones de la ONU? �Qu� ha hecho la ONU para desmantelar Hezbol�, como lo reclama una de sus propias resoluciones? M�s bien ha asistido impert�rrita a la fortificaci�n de sus b�nkers, sus campos de entrenamiento y el descarado patrocinio de pa�ses terroristas. Si Israel parpadea ser�a aniquilada. �Creer� don Oscar que es la ONU o sus bostezadores miembros, la que mantiene a raya a los enemigos de Israel? �Para qui�n es m�s oportuno este �hoy�, para nuestros amigos israelitas o para las pretensiones de Costa Rica en el Consejo de Seguridad? Hoy precisamente, cuando el terror nos recuerda sus �formas�, Israel necesita una expresi�n de solidaridad, no de una �jugada� diplom�tica. No puedo imaginar lo que Jerusal�n significa para un hijo de Abraham. Creo que don Oscar menos.
Jerusalem es la capital eterna de Israel. Era el Rey David el que danzaba en Jerusalem, como dice una canci�n: Jerusalem es la esposa del Cordero, es de gran altura, de gran anchura, amor que no tiene medida. Por eso amamos a Jerusalem…
Hay nuevos Faraones que desea exterminar al grandioso pueblo de Israel, como en los tiempos de Jos�, el fara�n desea tirar a los israelitas al mar.
Esos nuevos Faraones, se llaman de diversas maneras, todos bajo la cobija del terrorismo. Dice nuestro canciller que se van a restablecer relaciones diplom�ticas con pa�ses moderados �rabes. Yo me pregunto que deber�a definir el termino moderado, ya que en la mayor�a de pa�ses �rabes no existe la democracia como la conocemos, adem�s no podemos manejar nuestra relaci�n con el Medio oriente en t�rminos econ�micos, eso ser�a prostituir nuestras relaciones, como se ha hecho en el pasado. Israel podr�a entregar el cien por ciento de su territorio, si fuera el caso en buscar la paz, y los extremistas siempre desear�an tirar al pueblo de Israel al mar. Son irreconciliables esas posiciones.
El problema palestino a sido usado como un comod�n por los �rabes, nunca quisieron solucionarlo, ya que en lugar de invertir miles de millones de d�lares, en armas, entrenamiento, pago a las familias de los terroristas suicidas, y de todo ese tipo de terrorismo. Si ese dinero se hubiera invertido en educar a su sociedad civil, sacar al pueblo palestino de su paup�rrima vida, social, econ�mica y pol�tica, otro gallo cantar�a en Palestina.
Israel es la �nica democracia en Medio Oriente, y tiene sobre sus espaldas, el compromiso de ser la potencia regional, at�mica de esa regi�n. Israel debe asegurar sus fronteras al costo que sea, para asegurar a su poblaci�n.
Buses explotados, mujeres con bombas, destrucci�n de seres humanos en caf�s, en mercados, esa es la guerra de baja intensidad que Israel debe luchar d�a con d�a.
Yo como ciudadano costarricense, no me siento representado por la decisi�n de nuestro se�or presidente, creo que el bosque que fue sembrado en honor a don Luis Alberto Monge, como una manera de agradecimiento, por su decisi�n de tener la embajada de Costa Rica en la ciudad eterna, debe estar triste, por la mala decisi�n, de don Oscar, en tiempo y espacio, y como dice una antigua canci�n Shalom Jerusalem, la ciudad de paz, la ciudad eterna de Israel, Shalom.